Y ahora, ¿qué diré en mi presentación? – parte I
A lo mejor seguiste los consejos que te platiqué en mi post anterior y ya estás más tranquilo antes de iniciar tu #presentación, pero...¿ y el contenido?
¿Cómo debo transmitir el mensaje que elegí?
¿Qué información es importante?
¿Cómo demonios la estructuro?
No saber cómo atacar estas preguntas puede volver a dejarte en el inicio: asustado y con muchas dudas.
Veamos cómo armar una presentación:
1. De regreso al inicio: vale la pena repasar el punto fundamental de cualquier presentación: tu audiencia, para qué están ahí y qué información quieres que se lleven al salir de tu plática. Debes tener muy claro todo esto.
2. Decide el objetivo principal de tu presentación: ¿Vas a persuadir a tu audiencia e influenciar que hagan algo (o te compren algo)? O, ¿solo quieres informar sobre el estado de algún proyecto o actividad? Esta elección dicta la estructura de tu presentación.
3. Elige uno de los dos tipos de presentación y sigue la estructura.
Hablemos primero de las presentaciones para persuadir a tu audiencia.
Presentación para persuadir
En este tipo de presentaciones el objeto es que la audiencia haga algo al salir de la plática. Algunos TED Talks que hablan de activismo son muy claros en lo que quieren que hagas: dona a la causa, toma agua, etc.
En general estas presentaciones tienen la siguiente estructura:
1. Contexto o gancho: empieza con un problema, estadística o con una imagen dramática. Debe ser lo suficientemente fuerte para captar la atención de la audiencia.
2. Recomendación: ¿cómo planeas solucionar el problema anterior? Debe ser breve, específica y memorable.
3. Lista los beneficios de tu recomendación: todos los beneficios deben ser de alguno de estos tipos: tiempo, dinero o sentimientos.
4. Prueba cada uno de los beneficios anteriores: ahora repasa cada beneficio de la lista anterior y sé específico con el valor que tienen. Puede usar estadísticas o datos importantes, una imagen o una historia. Repite este punto por cada beneficio que hayas listado.
5. Da un resumen: al final, vuelve a decir tu recomendación y cada uno de sus beneficios. Con esto ayudas a que tu audiencia los recuerde.
6. Siguientes pasos: sé claro con lo que quieras que haga tu audiencia. ¿Tienen que visitar un sitio? ¿Darle like a alguna página? ¿Mandar un correo? Entre más específica la acción, mejor.
Hablaré de la presentación informativa en la siguiente entrada.
Este post contiene información que se explica en el libro Simply Said de Jay Sullivan